Consumo garantizará al menos un 80% de productos saludables en las máquinas ‘vending’ de hospitales y residencias

Lunes 1 de Diciembre de 2025
comida saludable

El RD de Alimentación Saludable de Hospitales y Residencias limitará la presencia de ultraprocesados y de los productos menos saludables que, además, sólo podrán situarse en las filas de menor visibilidad

El 80% de la oferta deberá consistir en productos saludables como agua, leche, fruta, frutos secos no fritos y bajos en sal, zumos, panes y sandwiches integrales, yogures sin azúcares, entre otros

La medida beneficiará a las personas usuarias de todos los hospitales y residencias tanto públicos como privados, así como de otros centros públicos que estarán bajo el paraguas de la normativa que prepara Consumo

Se favorecerá el acceso al agua mediante la implantación de fuentes en las instalaciones que ofrezcan agua potable de forma gratuita

Las bebidas calientes ofertadas en máquinas de venta automática serán dispensadas sin azúcar por defecto y el usuario podrá añadir una cantidad máxima opcional de 5g

La ingesta de ultraprocesados en nuestro país se ha triplicado en solo 20 años, pasando del 11 al 32%

Madrid, 1 de diciembre 2025.- Pablo Bustinduy, ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha anunciado este lunes que el Real Decreto para garantizar una alimentación saludable en hospitales y en residencias de mayores va a incluir la regulación de las máquinas de vending ubicadas en estos centros, garantizando que al menos el 80% de los productos que contengan sean alimentos saludables. La medida beneficiará a los personas usuarias de hospitales y residencias tanto públicas como privadas, así como de otros centros de titularidad pública que estarán bajo el paraguas de la normativa que prepara Consumo como puede ser un centro de salud o un centro de día, entre otros.

La oferta de máquinas vending en estos centros podrá ser igualmente un estándar de calidad nutricional para las ubicadas en otros lugares. El estudio del Observatorio Sectorial DBK de Informa calcula que en España hay más de 390.000 máquinas vending de alimentos y bebidas y su oferta ha mejorado en los últimos años. Sin embargo, las tendencias en alimentación muestran que es necesario continuar avanzando.

En concreto, el 80% de la oferta de las máquinas vending deberá consistir en productos saludables que establecerá el Real Decreto, como agua, leche, frutos secos no fritos bajos en sal, zumos de frutas, fruta, panes y sándwiches integrales o yogures sin azúcares, entre otros.

Consumo limitará, además, que los productos ultraprocesados o poco saludables, es decir, aquellos alimentos de formulación industrial compleja, con ingredientes transformados, aditivos y alto contenido en grasas saturadas, azúcares o sal, como algunos snacks, bollería industrial, bebidas azucaradas o galletas industriales, no puedan colocarse en las filas centrales y principalmente visibles dentro de las máquinas expendedoras. 

En esta línea, la normativa establecerá que las bebidas calientes ofertadas en máquinas de venta automática deberán dispensar el producto sin azúcar por defecto, pudiendo el usuario añadir una cantidad máxima opcional de 5 gramos. Además, se favorecerá el acceso al agua mediante la implantación de fuentes de agua, en las instalaciones, adecuadamente señalizadas, que ofrezcan agua potable de forma gratuita. 

El texto sobre el que el Ministerio de Consumo lleva tiempo trabajando, y en el que Sanidad es coproponente, también va a incluir la retirada de los ultraprocesados en los menús que se ofrecen a las niñas, niños y adolescentes ingresados en hospitales. Asimismo, la norma excluirá los alimentos ultraprocesados incluidos en la sección de platos y menús infantiles de las cafeterías y comedores abiertos al público en estos centros.

De esta manera, el Real Decreto de alimentación saludable en hospitales y residencias continúa la estela del Real Decreto de Comedores Escolares Saludables y Sostenibles que aprobó el Gobierno en abril de 2025, a través del cual se garantizó que las comidas en colegios e institutos cumplieran con las recomendaciones sanitarias de organismos científicos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Agencia Estatal de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN).

El ministro Bustinduy ha destacado que esta normativa responde a un clamor social y por parte de la comunidad científica, así como a las numerosas denuncias realizadas tanto por parte de la ciudadanía como de entidades sociales y de colectivos profesionales. “Alimentarse no es ni puede ser un mero trámite, es una dimensión de nuestra vida social y cultural. Por eso, desde las instituciones públicas tenemos que desarrollar medidas para que el derecho a comer bien no sea un privilegio”, ha subrayado.

Hace unos días, The Lancet publicó un amplio análisis basado en más de un centenar de estudios internacionales que alerta de que el consumo de alimentos ultraprocesados se ha convertido en una amenaza creciente para la salud pública. La investigación asocia su ingesta habitual con un mayor riesgo de obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad prematura, y señala además el desplazamiento acelerado de patrones dietéticos saludables —incluida la dieta mediterránea— hacia modelos dominados por productos altamente transformados. Según el citado estudio, la ingesta de ultraprocesados en España se ha triplicado en solo 20 años, pasando del 11% al 32%.

Organismos internacionales como la OMS y UNICEF han reiterado su llamamiento urgente a los gobiernos para frenar esta tendencia. Subrayan que la expansión global de los ultraprocesados representa una amenaza sistémica para la salud, la equidad y el bienestar infantil, y reclaman políticas ambiciosas y regulaciones más estrictas que aseguren entornos alimentarios saludables, identificando los hospitales y centros sanitarios, junto con las escuelas, como ámbitos prioritarios para su implantación.